Las hidroeléctricas del río Paute ya no tienen agua suficiente para producir la misma cantidad de electricidad que generaron hasta el jueves, por eso la política de las autoridades de energía cambió y decidieron que este viernes trabajen a menor capacidad para evitar que se detengan por falta de agua.
Mazar, Molino y Sopladora han seguido operando durante esta semana, pese a la crítica situación de sus embalses su energía es indispensable para cubrir la demanda y evitar que los apagones se extiendan.
Sin embargo, su aporte ha bajado constantemente durante la semana, al mismo ritmo que caen sus provisiones de agua.
El martes las tres hidroeléctricas produjeron 384 megavatios, el miércoles 388, el jueves 269 y el plan del CENACE es que este viernes generen solo 193 megavatios en promedio de los 1 700 que pueden producir.
La reducción de la generación es la alternativa para evitar que el embalse de Mazar baje 50 centímetros más y esa hidroeléctrica quede inutilizable.
En caso de que eso pase, se perderá también el control de la provisión de agua en el embalse de Amaluza de la central Paute Molino, que por estar más abajo del río, depende de las descargas de agua de Mazar.
Mantener la operación durante los últimos cinco días llevó al embalse de Mazar a pocos centímetros de su nivel mínimo.
FUENTE: ECUAVISA