Raúl R. (nombre protegido) fue beneficiario de un trasplante de médula ósea en el Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín (HCAM), en Quito. “Tuve cáncer y me dijeron que tenía cinco meses de vida pero sucedió un milagro: Dios y el IESS me salvaron la vida”, dijo tras recibir el alta médica.
Se trata del único centro asistencial, del Instituto Ecuatoriano de la Seguridad Social (IESS) y de la Red Pública Integral de Salud (RPIS), acreditado para realizar este tipo de procedimientos, a escala nacional.
El paciente, de 50 años, fue sometido a un trasplante autólogo de células progenitoras hematopoyéticas. “Estoy muy feliz y agradecido, ahora solo depende de mí cuidarme para que todo el esfuerzo que hicieron los médicos dé resultados”, comentó.
Relató que, en mayo de 2022, tuvo una tos muy fuerte. Pensó que sólo era eso pero luego sintió un dolor en el pecho y columna insorportables. Su tratamiento inicial fue en el Hospital del Día Cotocollao y como se requerían exámenes más exhaustivos le derivaron al Hospital Carlos Andrade Marín donde fue diagnósticado con mieloma múltiple.
El 24 de enero de 2024 ingresó para el trasplante. Estuvo hospitalizado 20 días, tiempo en el que fue intervenido para restaurar la función normal de la médula ósea y el sistema inmunológico. “Nadie se puede imaginar lo que uno siente cuando le dicen que le queda poco tiempo de vida. Primero me quedé en shock, luego reaccioné porque nunca perdí la esperanza.Gracias a la voluntad de Dios todo ha sido un éxito”.
Su esposa destaca que cuando se abrió la Unidad de Trasplante de Médula en el HCAM fue una gran noticia para ellos. Raúl afirma que ahora tiene una nueva esperanza de vida. “Confío en los doctores, gracias a todos por lo que hicieron por mí».
De 2021 a 2024, el IESS ha realizado 489 trasplantes de córnea, renales, hepáticos y recientemente de médula ósea. Los pacientes se mantienen en controles permanentes y me realizan exámenes médicos.
FUENTE: ECUAVISA