Una profesora en Quito fue condenada a prisión por cometer actos de odio contra un niño con autismo y discapacidad física del 71 %, quien, para el tiempo de los hechos, tenía 5 años.

“La profe Jessy me pinchó, pero es un secreto”. Estas palabras de ‘Nico’ (nombre protegido) revelaron las agresiones cometidas por su docente, Jessica Paola P. L., durante casi un mes en una escuela de la capital, entre abril y mayo de 2019.

La Fiscal de la Unidad de Personas y Garantías que llevó la causa explicó que ‘Nico’, además de tener autismo, sufría episodios epilépticos que se incrementaron debido a las agresiones físicas cometidas por su docente.

La condición del niño hacía que fuera más activo e inquieto que otros. Cuando ingresaba al aula tomaba juegos de rompecabezas y libros de cuentos, lo que devenía en castigos físicos. La ahora sentenciada pinchaba a ‘Nico’ con agujas en distintas partes de su cuerpo.

El antropólogo cultural, que compareció como testigo de Fiscalía a la audiencia de juicio, explicó que los actos infringidos por la procesada encajaron en un escenario de odio, vulnerando doblemente los derechos del menor: tanto por ser un niño como por su condición de discapacidad. Por su parte, el psicólogo forense detalló que las agresiones dejaron secuelas emocionales, como ansiedad, tristeza, rechazo y miedo, con un pronóstico negativo a corto y largo plazo.

El padre y la madre del pequeño también testificaron. Esta última aseguró que se percataron de las agresiones porque identificaron marcas en el cuerpo de ‘Nico’ mientras lo cambiaban de ropa. Esto llevó a la familia a denunciar los hechos ante las autoridades del plantel, lo que resultó en la destitución de la docente y la Rectora de la institución.

La madre de ´Nico´ agregó que, entre abril y mayo del 2019, los ataques epilépticos del niño se incrementaron, por lo que fue ingresado por emergencia al Hospital Baca Ortiz.

El médico tratante de esa casa de salud declaró que el aumento de estos episodios ocurrió porque el niño estuvo expuesto a altos niveles de estrés generados por las agresiones. Además, confirmó que, en una evaluación médica realizada el 10 de mayo de 2019, se encontraron las marcas causadas por los pinchazos con una aguja.

El Tribunal de Garantías Penales que conoció el caso sentenció a un año de prisión a Jessica Paola P. L.–como autora directa– del delito de actos de odio contra el pequeño.

La sentencia condenatoria fue emitida el 3 de diciembre de 2024, tras ocho meses de haber instalado la audiencia, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad.

FUENTE: VISTAZO

Por fausto

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