Elizabeth Otavalo, madre de María Belén Bernal, siente que el respaldo que le ofrecieron tras el femicidio de su hija se ha perdido con el paso del tiempo.
La semana pasada, Otavalo acudió a la Comisión de Garantías Constitucionales de la Asamblea Nacional en donde expresó su malestar.
Por ejemplo, recordó que en el Parlamento se creó una comisión para investigar el caso de María Belén Bernal y se ofreció una revisión del tema cada seis meses, algo que no ha sucedido con el cambio de autoridades. «¿Dónde está el seguimiento que acordamos? No existe».

Recordó que en 2023, el femicida Germán Cáceres tuvo una sentencia rápida. Pero la misma no se ha ratificado en segunda instancia, pese a que ya han pasado más de dos años. «Como ahora no hay redes sociales, como no hay fotografías, entonces dejémosle», manifestó.
Incluso señaló que ha pedido ayuda a determinadas asambleístas, sin dar nombres, pero le dijeron «que ya no le darán su apoyo político. Yo pensé que era un apoyo sororo».
Y agregó que pese a que tenía que enfrentar la muerte violenta de su hija, fue despedida de su trabajo en el Consejo de Protección de Derechos del Municipio de Quito. «Me botaron sin perdón ni olvido, me dieron una patada en el alma». «Me botaron de ese trabajo porque querían que esté alzando una bandera política. Solo somos utilitarias del momento», criticó, aludiendo a una politización del caso Bernal.
En entrevista con Ecuavisa.com prefirió no hacer referencia a determinado partido político, pero sí detalló que en ese trabajo tuvo que enfrentar una lucha para asistir a las diferentes diligencias por el femicidio de María Belén Bernal porque se las querían descontar de su trabajo. Tras un cambio de autoridades en el Consejo, la despidieron a inicios de octubre 2024 «porque no era de confianza».
FUENTE: ECUAVISA